La selección española sub 20 de baloncesto logra la plata en el Europeo. Fuente: FIBA

La selección española de baloncesto cae en los últimos minutos frente a Turquía pero deja muy buenas sensaciones en el Europeo de Grecia.

Avance Deportivo

La selección española de baloncesto sub 20 ha culminado el Europeo de Grecia con la conquista de la medalla de plata tras un buen encuentro en el que la magia de Oriol Paulí no fue suficiente. La derrota ante Turquía en el último minuto de partido no empaña lo más mínimo el papel de un ilusionante equipo y de una generación que será muy pronto el futuro del baloncesto español.

Con su quinteto de gala saltaba a la cancha ‘La Roja’ dispuesta a mantenerse fiel al estilo que había llevado al equipo hasta la final. La intensidad defensiva se convertía de nuevo en la principal seña de intensidad de un conjuntoo que ponía los primeros balones en manos de su pareja interior, Sebas Saiz y Willy Hernangómez, encargados de provocar los primeros quebraderos de cabeza en el combinado turco. 5 puntos consecutivos de Alberto Abalde, infiltrado por una luxación en un dedo, dispararían a un equipo cuya principal preocupación llegaría de la mano de Cedi Osman, autor de los 9 primeros puntos del cuadro turco. España mantenía su ventaja en el primer periodo por 14-18.

Un triple de Juancho Hernangómez servido por Darío Brizuela supondría la primera canasta del segundo cuarto para España, que no tardaría en sufrir el despertar turco. 5 ataques consecutivos sin anotar, unidos a 4 triples de la selección otomana ponían a España por primera vez por debajo en el electrónico obligando a Jaume Ponsarnau a solicitar un tiempo muerto en el que tirar de pizarra para reordenar esquemas (29-23). Alberto Abalde rompía el candado a falta de dos minutos con una canasta que daba oxígeno a España pero Turquía seguía a lo suyo anotando un ataque tras otro para marcharse al descanso con una renta de 7 tantos (33-25).

Tras el descanso, intensidad defensiva del equipo español liderado por un excelso Oriol Paulí que comenzaría a tener sus frutos con 5 puntos consecutivos para recuperar el mando de partido (37-38). El jugador catalán no bajaba el pistón con un nuevo triple en ataque. La lucha bajo los aros se intensificaría permitiendo al conjunto otomano alcanzar el final del acto con una ligera ventaja (48-46).

En el correcalles final los turcos salieron mejor parados, aunque tuvieron que sudar para imponerse. Con España 3 puntos abajo a falta de 46 segundos, Jaume Ponsarnau pararía el encuentro para tirar de una pizarra acostumbrada a levantar encuentros durante todo el Europeo. Turquía se anticipaba a la línea de pase anotando una canasta clave con la que acariciar la medalla de oro. España lo intentaba pero el tiempo jugaba en contra de un equipo que tendría que conformarse con una ilusionante plata de futuro (65-57).