Astrid Fina: «Cambié un pie por una vida mejor y ahora a disfrutar en Sochi»

La joven catalana sólo lleva 6 meses entrenando en la nieve y participará en los Juegos Paralímpicos de la ciudad rusa.

astridf

La ‘rider’ catalana Astrid Fina junto a su tabla de snow | AD

Jesús Ortiz García

Era dependienta de una joyería en Barcelona y el único deporte que practicaba era spinning en el gimnasio. Pero la situación de Astrid Fina dio un giro radical en 2009 cuando un coche le atropelló mientras iba en moto. Después de un calvario en el hospital con 13 operaciones y una infección no pudo salvar el pie derecho. La tabla de snow fue su mejor terapia y en apenas un año se ha convertido en una de las perlas del snowboardcross adaptado.

«Cogí una bacteria hospitalaria y ya no había nada que hacer. Decidí que me amputaran, era eso o que me quitaran los huesos y quedarme inútil. Hay que mirar hacia adelante y tomárselo con humor si no te amargas. A veces digo que cambié un pie por una vida mejor», subraya.

Esta ‘rider’ catalana nunca pensó que todo ese sufrimiento tendría su recompensa a través del deporte y, menos aún, en la nieve. El pasado invierno su amigo y profesor de snow Kiko Caballero le convenció para que probara: «Nunca lo había practicado pero me dio unas clases y me enganchó». Sólo unos días más tarde se animó a presentarse a las pruebas para el equipo español. «Era la única chica y me cogieron. Eso sí, me dijeron que mi nivel era cero pero que me iban a enseñar”, relata.

Equipo Snowboard Paralímpico enero 2014

Astrid Fina en una bajada de snowboardcross | AD

Desde entonces vive y se entrena en el Centro de Tecnificiación del Valle de Arán, donde con sólo 6 meses lanzándose a gran velocidad por el manto blanco ha conseguido clasificarse para los Juegos Paralímpicos. A Sochi acude sin presión pero con hambre de competición: «Estoy al 100%, un poco nerviosa pero con muchas ganas de aprovechar esta gran oportunidad».

A Astrid le parece injusto que tan sólo puedan participar los snowboarders que tengan discapacidad de cintura para abajo y que se haya quedado fuera el español Adrián García. «Me da rabia que no pueda estar en Sochi porque se lo merece, seguro que habría conseguido una buena posición. Entrena y compite igual de fuerte que nosotros, pero le llegará su oportunidad», confía.

Rápido aprendizaje

La ‘rider’ llega a la ciudad rusa muy motivada y con una progresión constante en cada carrera. En la última, en la Copa del Mundo de La Molina (Girona) fue octava y novena aunque con un tiempo muy cerca de la primera. «He tenido un aprendizaje rápido con grandes avances. El año pasado estaba a un minuto y medio de mis rivales y ahora estoy a pocos segundos de ellas. Las sensaciones son buenas», avisa.

En el estreno del snowboard en unas paraolimpiadas, la meta de la joven barcelonesa es coger madurez de cara a los Juegos Paralímpicos de Pyeongchang (Corea del Sur) 2018. «Quiero absorber toda la información y experiencia porque mi ilusión sería llegar a los siguientes Juegos más preparada para pelear por un título, sé que es posible», apunta.

Aunque para aspirar a estar en la cumbre de este deporte necesita apoyos y más rodaje en la nieve. «Los gastos para entrenar en invierno en Baqueira me lo paga la federación, aunque en verano me quedo en Barcelona realizando entrenamientos físicos, no hay recursos para tener ropa de entrenamientos, menos aún para viajar a países donde hay nieve. Es difícil encontrar sponsors pero es lógico, las cosas en España están mal y encima es un deporte nuevo, la gente no confía en nosotros. Aunque Institut Desvern si apostó por mí y me hizo una buena prótesis», comenta.

Los Juegos Paralímpicos serán un paso más en la aventura de esta intrépida deportista que mejora a pasos agigantados. «Tengo ganas de aprender, cada vez me siento más segura, cuando bajo siento felicidad y con ganas de intentar superarme en cada carrera», sostiene. Eso sí, confiesa que su punto débil es saber controlar los nervios, pero para superarlo tendrá a su entrenador Albert Mallol: «Necesito que esté a mi lado para hacer bromas, es gracioso y me ayuda a despejarme, me da mucha confianza antes de competir. En Sochi lo voy a dar todo y a disfrutar», apostilla.


Astrid Fina
Barcelona, 16-10-1983
Sólo lleva un año practicando snowboardcross adaptado y su progresión es muy buena.
Octava y novena en la Copa del Mundo de La Molina (Girona) en 2014.
Recomendar
  • gplus
  • pinterest

Comentar