El valenciano David Casinos deja el atletismo y competirá en ciclismo con el objetivo de llegar a Tokio 2020. Fuente: AD

El cuatro veces campeón paralímpico de lanzamiento de peso y disco ha prometido en el programa ‘Objetivo Tokio’ que pondrá «toda la carne en el asador» para estar en la cita de la capital nipona.

Avance Deportivo

@deportivoavance
8 de marzo de 2021, 11:00

David Casinos, 4 veces campeón paralímpico en lanzamiento de peso y disco, está afrontando en esta temporada un nuevo reto, convertirse en deportista paralímpico en la modalidad de remo, y aunque reconoce que «no va a ser nada fácil» conseguirlo, promete poner «toda la carne en el asador» en ese empeño.

Casinos explicó en el programa ‘Objetivo Tokio’ el proyecto en el que está involucrado para intentar que una embarcación de 4 con timonel pueda representar a España en los Juegos Paralímpicos. La Federación Española de Remo (FER) está trabajando con un grupo de deportistas entre quienes se escogerá a los componentes de la tripulación, quienes tendrán que ser obligatoriamente dos hombres y dos mujeres, dos con discapacidad física y dos con discapacidad visual, acompañados de un timonel sin discapacidad.

“Estamos trabajando todos por igual para obtener esa plaza, que no va a ser nada fácil. Nos quedaremos alguno por el camino, pero yo voy a poner toda la carne en el asador. Y si no lo consigo, pues habré aportado algo al remo español en esta larga carrera”, añadió. La selección definitiva de los cuatro componentes se decidirá de cara a la regata de clasificación paralímpica prevista para el mes de mayo en Italia. Y en esa regata es donde el bote español podría lograr la plaza para Tokio, algo que, según el propio Casinos, sería “histórico”.

El exatleta elogió el trabajo que están haciendo todos sus compañeros en la preselección de remo, una especialidad que definió como “muy técnica”, no sólo por parte de cada uno de los remeros individualmente, sino de todos en conjunto, para que “el bote vaya bien en el agua y vaya muy fluido”.

Casinos explicó que su transición del atletismo al remo se debió a que a nivel físico se encontraba muy bien y quería continuar su carrera con “un punto y seguido” y “seguir aportando ilusión al deporte paralímpico”.

El medallista de oro en los Juegos de Sídney 2000, Atenas 2004, Pekín 2008, Londres 2012 y de bronce en Río 2016 recordó como el momento más destacado de su carrera cuando desfiló como abanderado del Equipo Español en los Juegos de Pekín. “Ese momento marcó mi vida, cambió mi forma de ver el deporte: cómo con discapacidad puedes alcanzar todos tus sueños e inspirar a mucha gente”.

Confesó que “ni en mis mejores sueños” pensó que iba a llegar adonde ha llegado en el deporte paralímpico, sobre todo teniendo en cuenta que cuando empezaba incluso su madre le preguntaba cómo pretendía ser deportista de alto nivel teniendo una diabetes de tipo 1. “Tuve la oportunidad de creer en ese sueño y hoy lo he hecho realidad”.