Pinot corona Lagos de Covadonga
El francés se escapaba a cinco kilómetros del final y conseguía la victoria por delante de los cinco primeros clasificados de la general.
José Luis Bravo
@joseluisbm730
9 de septiembre de 2018, 23:59
Antes de la segunda jornada de descanso tocaba afrontar la decimoquinta etapa, la tercera consecutiva por las sierras asturianas que finalizaría en Lagos de Covadonga, puerto de categoría especial que nunca pasa desapercibido. Previamente a la ascensión final los corredores tendrían que afrontar el Alto de Santo Emiliano (3ª categoría) y el Mirador del Fito (1ªcategoría), por el que pasarían una segunda vez.
Volvería a ser una carrera rápida en la que no se definiría una fuga hasta el kilómetro 39 donde un grupo de doce corredores se asentaba en la cabeza de carrera con 2’20” sobre un pelotón que ha rodado con mucha intensidad durante todo el recorrido. La escapada aumentaba su ventaja muy lentamente, llegando a los últimos 100 kilómetros con cinco minutos sobre el grupo de carrera.
Los ciclistas encaraban la primera ascensión de la jornada al puerto de primera con un duelo entre el Astana, con Stalnov marcando el ritmo del pelotón, y Bennett del Lotto NL-Jumbo acelerando la fuga. Mollema (Trek-Segafredo) coronaría el mirador y se desmarcaría unos metros por delante de la fuga, que quedaría reagrupada en el descenso.
El Astana comandaba, pero los intentos de ataque en la fuga le devolvían una ventaja de cuatro minutos. La segunda ascensión del Mirador del Fito sería para King (Dimension Data) y a menos de 40 kilómetros de meta eran tres los minutos de retraso con los que rodaba el pelotón. Los ataques en el grupo de cabeza aumentaban la intensidad general de la carrera y en el centro del pelotón, Kwiatkowski y Geniez se veían involucrados en una caída.
Los escapados empezaban a notar el cansancio acumulado y el grupo se vería reducido a diez ciclistas. La velocidad del pelotón aumentaba y Fraile (Astana) lo encabezaría para hacer una selección de veinte favoritos. Cortina (Bahrain-Merida), que se llevaba el sprint en Cangas de Onís, llegaría a los últimos diez kilómetros manteniendo en solitario la fuga, pero el grupo de favoritos, ahora con 16 ciclistas y Bilbao marcando el ritmo, lo terminaría neutralizando al principio de Lagos de Covadonga.
Comenzaba un último puerto propicio para añadir emoción a la competición. El Astana había corrido una gran carrera y uno de sus corredores, Miguel Ángel López, sería protagonista en el tramo final. El colombiano iniciaba un ataque a 7’5 kilómetros de la línea de meta que alertaría al Movistar Team. Valverde y Quintana (Movistar) formarían junto a López (Astana), Pinot (Groupama-FDJ), Mas (Quick-Step) y Kruijswijk (Lotto NL-Jumbo) el grupo de corredores que se disputarían la etapa.
A cinco kilómetros para el final, un potente Pinot se perdía entre la niebla, Mas y Valverde apretaban, Kruijswijk resistía, Yates se desesperaba ante la pasividad de Quintana y López saltaba del grupo a falta de dos kilómetros. El de Astana, de momento el mejor joven de La Vuelta, no lograría alcanzar al galo, que vería recompensada su valentía con el honor de ganar en Lagos de Covadonga.
Finalmente, Yates aumentaba la ventaja sobre Valverde (+26”) y Quintana (+33”), siendo López (+43”) el único que conseguía arañar segundos. Kruijswijk cierra el top 5 a minuto y medio del maillot rojo. Mañana, jornada de descanso para planificar la contrarreloj individual de la etapa 16 (Santillana del Mar-Torrelavega).