Ejercicio físico, mucho más que masa corporal
Una actividad física moderada, como dar paseos, puede ayudar a reducir enfermedades crónicas no transmisibles, como diabetes, obesidad o patologías respiratorias.
Laura Pérez Torres
Las personas obesas que practican ejercicio tienen menos riesgo de fallecer o desarrollar enfermedades crónicas en los próximos diez años que aquellos sin problemas de peso que no están en forma, según las conclusiones de un estudio del especialista de la Universidad de Carolina del Sur (EEUU) Steven Blair, que el investigador ha presentado en la mesa redonda “Healthy Life Style Promotion”, celebrada durante el 20 Congreso Internacional de Nutrición de la IUNS que se está celebrando en Granada (España).
Blair, experto en el estudio del ejercicio físico sobre la salud, ha reconocido que “la actividad física es uno de las conductas que, junto a la dieta, el control del estrés, el buen sueño y no fumar, y añadidas a los genes, pueden ayudar a reducir las enfermedades crónicas no transmisibles, como las cardiovasculares, el cáncer, la diabetes, la obesidad y las patologías respiratorias, que son la principal causa de mortalidad en el mundo”.
“Hemos publicado numerosos estudios que concluyen que con un nivel moderado de ejercicio cardiorrespiratorio, el riesgo de fallecer por una enfermedad crónica no transmisible se reduce, independientemente de que estés en tu peso, tengas sobrepeso o estés obeso. Un buen ejemplo es andar: tres paseos de diez minutos cinco días por semana son suficiente”, ha comentado el experto.
En su ponencia, Steven Blair también ha aportado datos de varios estudios que demuestran que a partir de los 300 minutos a la semana (la recomendación de la OMS es de 150 minutos semanales), el ejercicio no parece aportar ningún beneficio extra para la salud.
“Hay evidencia acerca de la relación entre la dosis de ejercicio aeróbico y la respuesta que se obtiene en términos de salud. Generalmente, los datos muestran una asociación ascendente con beneficios sustanciales si se pasa de una vida muy sedentaria a un estilo de vida activo. No obstante, después de unos 300 minutos de actividad física de moderada a intensa a la semana, la curva ascendente empieza a hacerse plana y deja de haber beneficios adicionales”, ha explicado Blair.